La máquina del tiempo.

Benjamín Afonso Suárez.

¿Es posible construir una máquina del tiempo ?. Aún se sigue hablando de este artefacto, tanto en literatura de ciencia-ficción, más en esta por supuesto, como en literatura científica e incluso en algún seminario de esta categoría se sigue hablando de la máquina del tiempo. En un encuentro de relativistas organizado por el Instituto de Astrofísica de Canarias, si no recuerdo mal creo que a principios de 1997, el científico ruso Mr. Igor Novikov, que trabajaba en el Centro de Astrofísica Teórica de Copenhague, habló de la posibilidad de llevar a cabo la construcción de una máquina del tiempo, para lo cual habría que manejar cantidades de masa superiores a la de una galaxia, y cuya teoría estaría finalizada en unos 30 años. Sólo el diámetro de nuestra galaxia, la Vía Láctea, supera los cien mil años luz.

Pero primero, analicemos qué es el tiempo para ponerlo en su sitio y después veremos. El tiempo es sólo una magnitud contable, un valor cuántico, de contar, acumulativo ; por supuesto no es una realidad física, y tampoco es una interacción de fuerza, siguiera deducida, como por ejemplo lo es la "gravedad" que aunque no es una cosa física, sí es una interacción de fuerza constante-fija y además medible. Parecería como un milagro que algo sin existir exista, pero el tiempo no tiene capacidad por si mismo deja sus vestigios plasmados en la transformación de las energías. Ahí podemos palparlo y verificar nuestros diversos cómputos del tiempo. En las estrellas podemos, debido a su capacidad de calor y luz propios, apreciar la magnitud de su brillo. La magnitud en otra estrella.

Figura 1. "Galaxias espiral y amorfas en expansión". Cuadro de Benjamín Afonso Suárez. Portada de este número de SPACEX 90 . Nuevos Horizontes

Figura 2. "Hora nuestro Sistema Solar". Cuadro de Benjamín Afonso Suárez.

La transformación de unas energías en otras, incluyendo las masas de las estrellas, nos sirven de cómputos datables del tiempo de esas mismas cosas. Por tanto las únicas máquinas del tiempo posibles para horadar el pasado y algo del futuro, ya tenemos a nuestros antropólogos, geólogos, paleontólogos, biólogos, químicos, médicos y, entre otros tantos especialistas, también a nuestros buenos astrofísicos y astrónomos con sus grandes telescopios que nos acercan a energías muy similares a las primigenias de la creación.

Por tanto hemos de dotar de medios, cada vez más, a tantos buenos especialistas como hoy tenemos para lograr sus objetivos y, sobre todo, coadyuvar a la sincretización de una teoría cosmológica tan simple y bella como la Creación misma.

Dos cosas importantes se deducen, además, de este trabajo. La primera es que al no existir el tiempo, en el Universo todo está empezando siempre. La segunda es que el tiempo tiene una estrecha relación con la transformación de la energía ; no con el espacio.

Figuras 3 y 4. "Constante plana de la Tierra alrededor del Sol" (superior). "Cuásares forjando sistema galáctico" (inferior). Cuadros de Benjamín Afonso Suárez.