Nos reunimos unos cuantos coches y telescopios, y pasamos un buen rato charlando, observando y cenando, por supuesto.
No fue de las veladas más frías, pero aún así había que ir bien abrigado. Más de uno echó en falta guantes, gorro o un jersey más recio.
El cielo estuvo fabuloso, perfecto para planetas, por lo que pudimos observar la fina Luna creciente, Venus en fase, Júpiter con bandas y sus lunas,
Marte y algunos detalles en la superficie y al final de la noche un espléndido Saturno a 500 aumentos en una particular competición de refractor frente
a Smith Cassegrain. Al no haber apenas Luna también pudimos disfrutar de un buen cielo profundo, y no parabamos de contar galaxias en Virgo y alrededores.
Por supuesto, observamos la supernova de M95 y el cometa Comet C/2009 P1 Garradd en la Osa Mayor, visible con prismáticos y casi a simple vista.
Cometa "Comet C/2009 P1 Garradd" en la Constelación de la Osa Mayor:
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