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Montañas |
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Esta es mi otra gran afición. Deslizarse sobre unos esquís en invierno por las montañas del Pirineo es como encontrarse en otro mundo. Aquí te sientes solo con tus esquís, tu mochila, los compañeros... y las montañas. Cada salida es una jornada llena de emociones y sorpresas. Bajo el Pico de la Fonlletera soplaba un fuerte viento y el frío era intenso, pero encontramos una buena nieve y pudimos disfrutar de un agradable descenso. |
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El Gra de Fajol no es una montaña muy alta pero aquí casi siempre sopla el viento. Una vez ganado el Collado del Orri se accede a la loma que te llevará hasta la cima. En cualquier ascensión, este es un momento muy especial pues la vista se abre en todas direcciones y se acostumbra a divisar claramente el objetivo de la jornada. |
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Las ascensiones en verano también son inolvidables. Una buena idea es huir de las cimas más concurridas y atreverse a descubrir otras montañas más discretas. El Pico Aragüells eleva sus más de 3.000 metros frente al enorme Lago de Cregüeña. Detrás nuestro se ve el Aneto. |
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